Paraíso no escapa de la violencia
Informe: Aumenta la delincuencia
El temor, la preocupación y la ola de violencia son las realidades que viven los residentes de San Miguelito, específicamente los del sector de Paraíso. Pese a que para algunos, la delincuencia ha disminuido; para otros se ha incrementado, por ello han decidido no salir de sus casas a ciertas horas de la noche para evitar ser atacados.
El 87% de las personas, de los 315,019 habitantes que tiene el distrito, manifiestan que no pierden las esperanzas de disfrutar de mejores días y poder transitar por las calles con seguridad, ya que según algunos, no se puede caminar tranquilo por Paraíso.
Pandillas
En los seis corregimientos que componen el distrito, operan cerca de 44 pandillas, en su mayoría menores de edad liderados por adultos.
De estas 44 pandillas, se conocen tres grupos delictivos, uno de los más antiguos son los Boysquilar, pero actualmente están detenidos y se mantienen inactivos.
Hay otros que operan en la Loma del Cristo, por ejemplo la banda Onda, que en estos momentos está bajo la lupa de las autoridades, al igual que las pandillas de Calle P, prácticamente nuevas. Estas tres agrupaciones no actúan de manera abierta debido a que sus cabecillas están tras las rejas, además de que operan en otros sectores y no en su área.
Estadísticas
El subcomisionado Víctor Guerra afirmó que el sector de Paraíso es uno de los más tranquilos del corregimiento Rufina Alfaro.
Las estadísticas de la Zona Policial de San Miguelito indican que no hay un alza en cuanto a delitos y faltas menores, pero sí en delitos de impacto (homicidios).
En los primeros seis meses de este año, en comparación con 2012, se logró una disminución de homicidios en un 42%, pero esta rebaja es gracias al apoyo de los residentes de las comunidades en conjunto con la Policía Nacional.
Testimonio
Un menor de edad, cuya identidad no será revelada, cuenta que fue beneficiado gracias a los planes de resocialización que se efectúan en San Miguelito.
Él fue rescatado un día por el padre Reynaldo Karamañites, cuando robaba en una residencia junto a una persona adulta que lo invitó a realizar una supuesta reparación en un techo. De inmediato fue llevado a la Corregiduría de Mateo Iturralde en Paraíso, donde realizó trabajo social durante una semana.
Hoy por hoy, salió del mundo delictivo y cursa el VII grado (primer año) de la secundaria.
El menor exhortó a la juventud a educarse, pero sobre todo a obedecer a los padres y no dejarse llevar por la presión de grupo.
Peticiones de los residentes
Las personas que habitan en todo San Miguelito claman para que las autoridades y demás organizaciones civiles mejoren la calidad educativa, fortalezcan los valores morales y sociales y contribuyan en la reducción del desempleo.
Programas que cambian vidas
José Polo, director ejecutivo de la fundación Dame una Oportunidad, en San Miguelito, dijo que en el lugar se trabaja con programas de educación, actividades deportivas, eventos espirituales, capacitaciones y entregas de becas para los jóvenes.
Polo calificó como un problema psicosocial el populoso distrito capitalino de San Miguelito, donde la tasa de homicidios y hechos delictivos aumentan.
Por su parte, el subcomisionado Víctor Guerra manifestó que la Embajada de los Estados Unidos implementó el programa "Alcance Positivo" desde el año 2012. Este sistema brinda a la juventud de comunidades vulnerables mejores oportunidades de educación y capacitan a las mujeres en cursos de repostería, manualidades, entre otros.
Los vecinos de las comunidades también son pieza clave en los planes de erradicación de la violencia e inseguridad al crear "Vecinos Vigilantes", de los cuales hay 31 activos y 37 inaugurados, pero aún no funcionan.
Estos proyectos han beneficiado a más de 1,000 jóvenes que han sido sacados de las pandillas.