viva
El pacierazo Serafino, de 32 años, era el galán más codiciado por las curvilíneas en edad casadera y también por las mujercitas casadas, viudas o dejadas por sus quita fríos.El man tenía un buen trabajo y ocupaba el cuarto que está frente al palo de mamón, el más ventilado y a donde llegaba la brisa del cerro Ancón.