Si en algunos barrios las lluvias de balas y los robos están a la orden del día, en Viejo Veranillo frente a la Universidad de Panamá los problemas de delincuencia no se quedan atrás.
Algunos de sus residentes quienes por temor pidieron la reserva de su nombre, señalaron a "Crítica" que tienen miedo de salir en horas de la madrugada a sus puestos de trabajo.
"Ayer, una señora fue víctima de dos menores de edad que la estaban siguiendo y le robaron con un arma de fuego su cartera con todos sus documentos", revelaron.
La señora entró en "shok" y del susto procedió a entregarle la cartera sin pensarlo dos veces. Los pequeños malhechores se dieron a la fuga y no hubo detenidos.
LLUEVEN LAS BALAS
Sus moradores también dicen que en horas de la noche sujetos desconocidos realizan disparos al aire que hasta el momento no han dejado heridos.
ESPERAN QUE SE MUEVAN
Aseguran que los maleantes solo esperan el momento en que las unidades de la policía se muevan para acechar a su víctima. Además, se quejan de la venta y consumo de droga.