Para los pescadores de la playa Santa Clara, en Antón, decir pescado fresco es una realidad. Pues ellos sacan el pescado de la playa y va directamente al sartén.
Según los pescadores del lugar, la vida en el mar es un poco difícil, pero lo compensa llevar una gran cantidad de pescado fresco y poder venderlo inmediatamente a sus vecinos y a turistas que llegan porque es mejor fresco que ya pasado.
En Santa Clara no solo hay lujosos hoteles y comercios para el turismo. Al final se encuentra la población de pescadores y son ellos los que se caracterizan por vender el producto marino de la región.
Para cada pescador no importa el precio que le ponen, lo más importante es que sea de buena calidad y que esté fresco y es esto lo que gusta a propios y visitantes: un verdadero pescado fresco.
Esta es parte de la costumbre de la región antonera, dar el mejor pescado.