Una tarde de esparcimiento que incluyó la asistencia al juego de béisbol juvenil entre las novenas de las provincias de Los Santos y Chiriquí, en el Estadio Nacional, terminó en una terrible tragedia.
Tres miembros de una misma familia, entre los que se encontraban una pequeña niña de cinco años, fallecieron la noche del domingo, luego de que el auto Sedán Chevrolet, en el que viajaban, fuera embestido por un bus de la ruta Panamá-Colón.
La tragedia ocurrió en la Vía Boyd Rooselvet en las proximidades de la entrada de Chivo-Chivo en el corregimiento de Alcalde Díaz.
Según testigos el auto negro con matrícula 476633, fue embestido por la unidad 3B-721 con placa 684109 de la ruta Panamá-Colón, conducido por José Ramos Pérez, de 31 años, cuando pretendía hacer un giro para entrar a una barriada.
En el accidente fallecieron Marina Him, de 60 años, Ricardo Luque Espinosa, de 17 y la niña Andrea Espinosa, de 5 años, quienes salieron disparados del vehículo.
Marina Him era abuela de Andrea y Ricardo, que a su vez eran primos.
En este hecho de también resultaron con heridas con traumas múltiples: Haydé Espinoza, de 31 años y Armando Ramírez.
El dolor se apoderó de los familiares de los afectados en este accidente tránsito quienes se acercaron al lugar de la tragedia.
Moradores del lugar se quejaron de que en el sitio hace falta un semáforo y un puente elevado para evitar que se sigan dando más accidentes.
Ricardo Luque Falcón, abuelo del menor de 17 años que falleció que llevaba el mismo nombre, reveló que los afectados se dirigían a su residencia de Villa Zaíta, cuando ocurrió el hecho fatal.
Reveló que su nieto era un adolescente de buen comportamiento que le encantaba jugar al fútbol.
Destacó apesadumbrado que el menor Falcón iniciaba ayer lunes sus cursos universitarios porque era su objetivo estudiar para ser alguien en la vida.
En los 40 días que van del año 2009 han fallecido en las carreteras del país un total de 42 personas. Las autoridades recomiendan entre otras cosas, caminar por las aceras y al cruzar las calles cerciorarse que no venga ningún vehículo.