El presidente ruso, Vladímir Putin, declaró ayer que Moscú apuntará con sus misiles a todo país europeo que acoja en su territorio elementos del sistema antimisiles norteamericano, que supone una amenaza para la seguridad de Rusia.
El líder ruso precisó que sus palabras se refieren tanto a la República Checa y Polonia, que pueden acoger elementos del escudo antimisiles de EE.UU. , como a Ucrania, cuyo Gobierno pide el ingreso del país en la OTAN.
Al mismo tiempo, dijo que Rusia no se propone "apuntar sus misiles sin necesidad extrema" y que en todo caso sería una "medida de respuesta" a los planes de EE.UU. de instalar un radar en la República Checa y una base de cohetes interceptores en Polonia.
Putin agregó que los gobiernos checo, polaco y ucraniano actúan sin siquiera consultar a sus pueblos, lo que en su opinión no tiene nada que ver con las "normas de la democracia".
ANTECEDENTES: PROBLEMA
En junio de 2007 el Parlamento Europeo organizó una audiencia pública en la que se discutieron los planes estadounidenses de desplegar escudos antimisiles en Polonia y República Checa. Sin embargo, Rusia se opone a este proyecto por considerar que amenazan su territorio.