El ministro de Gobierno, José Raúl Mulino, advirtió que los empresarios de la construcción son solidariamente responsables por los daños causados durante la protesta de los obreros del sector el pasado martes.
No sólo fueron piedras, sino hasta sacos de cemento que se lanzaron desde lo alto de edificios en construcción, que si le cae a un cristiano, lo entierra allí mismo, añadió Mulino.
En tanto, los voceros de la CAPAC rechazaron responsabilidad en los hechos y alegaron que los obreros y su dirigencia son los que tienen que responder ante esos hechos.
Mientras, la Alcaldía de Panamá interpuso una denuncia ante la Fiscalía Auxiliar por la quema de la grama de la Cinta Costera.