"Quizás su error fue ser amigo de todos, de los buenos y los malos, de los unos y los otros, tal vez eso no le agradó a alguien y pagó con su vida", enfatizó la madre.
Pero, mientras las autoridades investigan los entretelones de otro homicidio más que desangra al distrito de San Miguelito, una sociedad se pregunta: �Hasta cuándo se seguirán perdiendo más vidas a causa de la violencia sin sentido?
Una violencia por la que una niña de tan sólo cinco meses, nunca llegará a conocer en vida a su padre y por la que una madre nunca borrará de su mente aquella fatídica tarde en que un pedazo de su alma se fue con su hijo fallecido.