En medio de estos recorridos por El Valle de Antón también se puede interactuar con la comunidad, pues hay residencias y en La India Dormida hay comunidades que se dedican a la conservación de este cerro. Esto también resulta un atractivo turístico para todos.
Mario Urriola es biólogo y por más de diez años ha trabajado con serpientes y ranas.
�l considera que las ranas, serpientes y otros animalitos también son atractivos para los turistas que se admiran al ver una rana dorada.
Asegura, además, que es de gran importancia que cada lugar turístico sea protegido para que se conserve y de esta manera más turistas puedan seguir disfrutando de la naturaleza en El Valle, que es un regalo de Dios.
Según el biólogo, muchos visitan el monumento natural al Cerro Gaytal, en donde hay una diversidad de especies de plantas y animales.
Para los residentes de estas paradisíacas tierras, es un honor vivir en ellas, porque además de ser ricas en clima, ofrecen un gran aporte económico por su actividad turística.
Muchas personas, a diario, lo visitan para recorrer sus senderos y sitios turísticos, también el zoológico El Níspero.