Con un abrazo selló el crimen que, supuestamente, perpetró.
Se trata de Juan José García Moreno, de 21 años, quien llorando abrazó a Omaira Vásquez, horas después que, presuntamente, mató a la hija de ésta, Yasuri Omaira Rodríguez, de 14 años, con quien tenía más de un año de noviazgo.
La madre de la hoy occisa explicó que en medio del gesto, Juan le manifestó que pandilleros habían asesinado a Yasuri.
La menor tenía tres meses de vivir con Juan y, según versiones de los vecinos, éste la maltrataba constantemente.
"Yo nada más voy a llegar hasta los 15 años", le había dicho Yasuri a su madre, pero lo que nunca le reveló es que Juan la tenía amenazada con matarla si algún día lo abandonaba.
La familia presume que Yasuri decidió terminar la relación. Tenía planeado retornar a la casa materna. Días antes, Yasuri le comunicó a su madre que Juan había comprado un arma de fuego. "Con esa misma arma te va a matar", le vaticinó Omaira, con un instinto de madre que posiblemente no falló.
Omaira dijo que los moradores de Villa del Rey, Panamá Viejo, escucharon a Juan discutir con su novia y después una detonación de un arma de fuego a las 4: 00 de la madrugada del domingo.
Yasuri fue llevada al Hospital Integrado San Miguel Arcángel, donde le dictaminaron la muerte a las 8: 30 de la mañana.
Juan -que anteriormente había sido detenido por otros delitos- limpió la escena del crimen antes que llegaran las autoridades. Cuando fue aprehendido, se declaró inocente.
Yasuri vivió con sus abuelos paternos desde los dos años hasta el 9 de diciembre del 2006, cuando se fue a vivir con su madre y después con su novio. Aún en la casa de sus abuelos permanece su cuarto intacto, con las pruebas de sus pasatiempos: el dibujo y el fútbol. Las paredes llenas de imágenes y un póster de su equipo favorito: Barcelona, serán los únicos recuerdos tangibles con los que podrán contar sus familiares y amigos, pues un desalmado apagó su grito de �Gol!