La procuradora general de la Nación, Ana Matilde Gómez, negó que le hayan ofrecido el cargo de magistrada de la Corte Suprema de Justicia, y aseguró "que en caso tal que se lo ofrecieran, no lo aceptaría, pues esta no es la forma correcta, en estos momentos, de coronar su carrera jurídica y su trayectoria pública".
La jefa del Ministerio Público también señaló que en conversaciones que ha sostenido con el fiscal especial, Dimas Guevara, el mismo le ha informado que podrían decretarse otras medidas que alcanzarían a altas personalidades.
Gómez negó que se hayan dado presiones por parte del Ejecutivo en el caso de las muertes por los medicamentos envenenados, a pesar de que altas personalidades de la actual administración se encuentran bajo investigación.
Aclaró que la Constitución Nacional le da toda la potestad para solicitar la separación del cargo de aquellos funcionarios a los que se les ha decretado medida de privación de libertad, potestad que ella puede delegar en cualquiera de sus subalternos en el Ministerio Público.
Ana Matilde Gómez aseguró que la reciente detención del actual director general de la Caja de Seguro Social, René Luciani, y de sus antecesores Rolando Villalaz y Juan Jované, no fue un "show" como muchos lo han tildado, al tiempo que reiteró la recomendación a sus fiscales que la detención preventiva sea la última medida a tomar, sólo en aquellos casos en donde se corra un peligro procesal por una posible fuga de los imputados.
Consideró que existe mucho desconocimiento y desinformación de la labor que ejerce el Ministerio Público, y le recordó a la ciudadanía que los delitos no sólo se cometen por acción sino también por omisión, en el caso de aquellos funcionarios que teniendo una obligación no cumplen con la misma.
Gómez puntualizó que ahora sí existe un Ministerio Público sin injerencias ni presiones.