Tres sujetos resultaron heridos con arma blanca y objetos contundentes, tras un confuso incidente que se dio en el área de San José Villalucío, del corregimiento de Pedregal.
Catalino y Alex Mejía, padre e hijo, de 42 y 21 años, respectivamente, así como un tercer sujeto, fueron apuñalados y golpeados, según sus familiares, después que un bodeguero se negara a devolverle el vuelto de las pintas que compraron y al reclamarle, en vez del sencillo lo que les dio fue filo.
Sin embargo, esta versión fue totalmente desmentida por Brígido Charisco, el hombre con el que tuvieron el percance.
Charisco asegura que a estos tres sujetos los sorprendió a lo interno de su vivienda, supuestamente, consumiendo sustancias ilícitas. Fue por esto que los echó, pero lejos de irse, lo que hicieron fue atacarlo, por lo que se defendió, y luego huyó a esconderse donde un vecino, desde donde llamó a la Policía.
Asegura que no hirió a estas personas, sino que entre ellos mismos lo hicieron.