Un incendio todavía no controlado en una zona rural del centro de Argentina, donde al menos 50,000 hectáreas han sido arrasadas, ha obligado a evacuar a 120 pobladores y ha afectado a varias viviendas, informaron ayer fuentes oficiales.
Un 200 bomberos trabajaban ayer en la provincia de Córdoba para controlar los focos de incendios originados por la quema de pastizales y esparcidos rápidamente como consecuencia de la sequía que afronta la región.
En tanto, la policía informó de que detuvo anoche a un boliviano de 23 años cuando intentaba prender un fuego con papel y un encendedor en una zona de pastizales de las afueras de Córdoba, a 750 kilómetros de Buenos Aires.
Las nubes de humo y cenizas provocadas por el fuego llegaron a la capital cordobesa, cuyo aeropuerto se encontraba ayer "inoperable" para los aterrizajes a causa de la escasa visibilidad, indicaron portavoces aeroportuarios.