Las revelaciones sobre la candidata vicepresidencial republicana, Sarah Palin, dejaron en un segundo plano el mensaje de la Convención Republicana y obligaron ayer al propio John McCain a defender su decisión de elegirla.
Palin, gobernadora de Alaska, admitió el lunes que su hija Bristol, de 17 años, está embarazada de cinco meses y se casará con el padre del bebé.
Además, también se dio a conocer el mismo día que contrató un abogado privado para que la represente en la investigación que se desarrolla en Alaska sobre un presunto abuso de poder, que incluye presiones para el cese de su ex cuñado como agente de Policía.
En las últimas horas, además ha salido a la luz que su esposo fue detenido por conducir en estado de ebriedad en su juventud.
Hasta tal punto se han multiplicado las revelaciones que el mercado de predicciones políticas por Internet Intrade calculaba en un 12 por ciento de posibilidades de que Palin acabe retirando su candidatura, una cifra muy baja pero que se ha elevado desde el 3 por ciento con que comenzó al anunciarse el nombramiento el viernes.
El propio McCain se ha visto obligado a defender su decisión de escoger a Palin, ante una polémica que ha hecho que algunos cuestionen la capacidad del candidato para tomar decisiones importantes.