REFLEXIONES
Nietos y abuelos
"El escritor sólo puede interesar a la humanidad cuando en sus
obras se interesa por la humanidad..." (Miguel de Unamuno)
Raymundo A. Moore W.
No se quién quiere
más... los nietos a sus abuelos, o los abuelos a sus nietos. Como
quiera que sea, se trata de un inconfundible amor nacido de el más
profundo y más sincero afecto entre estos dos parientes. Estoy convencido
que jamás habrá un sentimiento de amor y cariño más
puro como ese que se expresan nietos y abuelos (a cualquiera edad), tanto
que, en ocasiones, tal afecto mutuo ha despertado los celos de los padres
quienes acusan a los abuelos, o sea a sus padres, de querer "quitarles
a sus hijos". Esto, aunque absurdo, suele ocurrir porque SI hay, especialmente
las abuelas, que se "adueñan" de los hijos de sus hijos.
Y si son jubilados, mucho peor... hay familias en donde gran parte de
lo que reciben estos señores (jubilados), está destinado para
"los estudios" de los chiquitines, para "los zapatos de Linda",
o para la comida de la quincena de Jaimito". Ellos, los querendones
de los abuelos, se conforman con unas cuantas galletas de dieta, y alguna
soda para "sacarse los gases". ×Fíjense ustedes el
tremendo problema social que ese tipo de amor está causando: cuadros
clínicos que diagnostican gastritis severas, úlceras estomacales,
y, finalmente, cáncer en alguna parte del aparato digestivo.
Y es que cada vez que la hija y el yerno (o el hijo y la nuera) quieren
salir, ocurre lo inevitable:
- Mamá, cuídame al Toti, que Migue y yo vamos a salir...
ahora mismo regresamos...
La abuela, engreída y bastante encariñada con el nietecito
(esta abuela logró operarse temprano después de su segundo
hijo, y no puede parir para volcar todo su amor en hijos propios), por lo
que no vacila en responder:
Dále Maye, yo te lo cuido, no faltaba más... pero me traen
algo...
Yo le pregunto a los abuelos, pero especialmente a las abuelas, qué
diferencia existe entre la forma como ustedes se jodieron levantando a sus
hijos, para justificar que ahora esos hijos la quieran seguir jodiendo atendiendo
también a los hijos de ellos, o sea a los nietos de ustedes?
No les parece que esa actitud lo que hace es "dañar"
no solo a los hijos de ustedes, sino también, y quizás más,
a los nietos, porque éstos, al ser consentidos tan excesivamente
por ustedes (¡y no lo nieguen!) se vuelven malcriados y desobedientes
con sus padres quienes, a su vez, por el hecho de pasar menos tiempo con
esos sus hijos lo que hacen es "echárselos" a ustedes los
abuelos con un desesperado e indiferente, "...no los aguanto, ahora
mismo los llevo donde sus abuelos...!, lo cual profundiza el problema, porque
entonces el niño se siente malquerido por sus padres, prefiriendo
la compañía -y el afecto- de sus abuelos, lo que nos lleva
de vuelta al principio de todo este embrollo.
- "Allí se lo dejo... para que lo corrijan... a mi no me
quiere hacer caso", es lo que le dice el hijo a su madre.
Por otro lado, también quiero llamar la atención a esos
hijos sinvergüenzas que creen que "hacer hijos es un juego, algo
así como lo recientemente llamado "clonación", confundiendo
esa relación divina de la procreación con, según ellos,
un simple acto sexual de engendrar y concebir hijos para luego echárselos
a los abuelos, mientras que ellos, los padres del niño, se "echan
fresco" bailando en las discotecas hasta altas horas de la noche, y
durmiendo hasta el medio día, contentos y satisfechos que sus hijos
están (¡SI!) con abuelo y abuela.
Quiero a los abuelos, a todos, y admiro el gran amor que le profesan
los nietos, más tal vez del o que le dan sus propios padres, pero
los abuelos no son los segundos padres de los nietos y no acepto que ningún
abuelo quiera usurpar el papel de padre que le corresponde a sus hijos.
Es más, la ley no contempla la sustitución de los unos por
los otros.
Tengo más, mucho más que hablar sobre este tema, pero ustedes
saben, espacio es mi enemigo.
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| AYER GRAFICO |
| "El Tigre" Victorio Vergara Batista con miembros de la prensa
nacional. |
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