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Transportistas no quieren regulación de plataformas digitales
El anteproyecto, aún pendiente de ser considerado en la comisión de Comunicación y Transporte, ha generado controversia entre los transportistas.
Organizaciones de transportistas se han mostrado preocupadas por un anteproyecto presentado por el diputado Abel Becker en la Asamblea Nacional el pasado 31 de enero, que busca regular las plataformas tecnológicas de información y comunicación en el servicio de taxis de lujo.
El anteproyecto, aún pendiente de ser considerado en la comisión de Comunicación y Transporte, ha generado controversia entre los transportistas.
El Sindicato de Conductores de Taxis Urbanos se pronunció en contra del proyecto, argumentando que este no se ampara bajo la ley de transporte y, por tanto, no tiene asidero jurídico.
El equipo legal de los transportistas también señaló que la iniciativa viola la ley de transporte, ya que las plataformas tecnológicas solo comunican la necesidad de un usuario del servicio de transporte.
En palabras de uno de los abogados del sindicato, "que los padres de la patria quieran regular o establecer las plataformas de manera legal nos parece un exabrupto jurídico". Además, han destacado que estas plataformas tienen capital extranjero y que la ley es clara en que el servicio de transporte solo lo pueden explotar nacionales.
"Nos están quitando el pan de la boca para dárselo a los extranjeros", han afirmado.
Los transportistas han señalado que hay otras esferas que deben intervenir en este tema, como el Código de Trabajo, bajo el cual deben operar las empresas que ofrecen servicios de alquiler de taxis en el ejercicio de las relaciones laborales con los ciudadanos que realizan la contratación.
Asimismo, han destacado que estas plataformas están evadiendo al fisco con su funcionamiento, sin que exista una regulación para tal finalidad.
En este sentido, los transportistas han solicitado al Gobierno que se proceda a regularizar las plataformas de transporte, para que cumplan con sus obligaciones tributarias y se respeten los derechos de los conductores y usuarios de este servicio.
La regulación debe ser justa y equitativa para todos los actores involucrados, han concluido.