Los cuatro menores que luchan por sus vidas en el Hospital Santo Tomás siguen sedados y con severas quemaduras, según los últimos informes.
Se informó que por no tener piel que los proteja, se han presentado infecciones que complican su estado de salud, y hay uno cuya condición ha empeorado.
Tres de los siete menores que ingresaron al Hospital Santo Tomás han fallecido a raíz de las quemaduras externas e internas por la inhalación de humo.
Al cierre de edición se informó que más de 30 policías que estuvieron presentes el día del suceso en el Centro de Cumplimiento de Menores, en Tocumen, el 9 de enero, están cumpliendo funciones administrativas en la sede de Ancón.