Los países centroamericanos que como Panamá están dolarizados o cuyas monedas están ligadas al dólar, se encuentran más protegidos de las fluctuaciones de las tasas de cambio que se vienen dando, advirtió el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El BID aduce que las fluctuaciones en las tasas de cambio influirán en una baja en las remesas, que luego de muchos años de crecimiento comenzaron a resentirse en el 2008, a medida que los principales países, fuente de estos recursos, Estados Unidos, España y Japón, cayeron en recesiones.
El año pasado, los emigrados latinoamericanos y caribeños enviaron unos $69.200 millones a sus países de origen, 0.9% más que en el 2007, según el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del BID. Pero la tendencia cambió luego del primer semestre del 2008.