Para el médico psiquiatra Gonzalo González, la persona que intenta suicidarse da siempre algunos avisos como "no quiero seguir viviendo" o "quiero descansar de esto", suelen dejar notas e incluso regalan sus cosas más íntimas a sus amigos; lo que debe alertar a los familiares.
Advierte, además, que los medios de comunicación también influyen al estar mostrando fotos, magnificar a los suicidas como valientes o algo exitoso, se da una mensaje de glorificación del hecho y no como algo lamentable para la sociedad.
Una misión para los medios de comunicación es dar a conocer las estadísticas y estudios sobre este tema, de modo que sirvan para orientar a las personas a que busquen ayuda en determinados puntos, en los que se puede brindar atención médica.
El estudio realizado por el MINSA en Panamá Oeste, indicó que para el 2007 un 34.3% de los que intentaron suicidarse eran mujeres y un 59% fueron hombres.
Para el 2008, la cifra se estableció en 31.7% las mujeres y 64% los hombres que atentaron contra sus vidas, por diferentes razones. Siendo aun más preocupante el que dentro de estas cifras estén incluso menores de 10 años.
La Red midió también la intencionalidad desde el 1 de septiembre de 2005 hasta el 31 de agosto de 2007, en las personas que presuntamente intentaron suicidarse.
Un 57.8% dijo que sí tenía intenciones de quitarse la vida y 36.1 no tenía esas intenciones. Según la gravedad con la que llegaron al cuarto de urgencias, el 67.2% no era de gravedad y el 21.8 sí lo eran.
Entre los que consumieron sustancias psicoactivas como drogas y alcohol, el 52.4% manifestó que pretendían suicidarse y el 38.5, no.
