Fue en agosto del 2005 en ciudad de Guatemala. Aquella noche Julio Medina III se hizo expulsar de la manera más infantil posible: se barrió sobre un contrario sobre la raya lateral del centro del campo, en una jugada que no representaba ningún peligro para los nuestros.
Faltaban largos 45 minutos y Panamá ganaba 2-1. El desenlace ya es conocido: los chapines dieron vuelta al marcador y se impusieron 3-2. Ese partido mató nuestro sueño de clasificar a Alemania 2006.
Tras el duelo se habló mucho de la expulsión de Julio Medina e incluso, hasta se mencionó que había recibido 30 mil dólares por hacerse expulsar. Por coincidencias del destino, el jugador para esa época militaba en el Comunicaciones de Guatemala.
Tres años después, con la sinceridad que lo caracteriza, Medina III negó esas acusaciones y señaló que quiere limpiar su nombre.
"Fue una jugada fortuita, la gente no está acostumbrada a verme jugar así y quizás pensaron cosas.. quiero que comprendan que era un partido de eliminatoria, me entusiasmé y me sacaron con roja. Yo quería ganarle a Guatemala en su casa", comentó.
"Puchito" no quiso dejar cabos sueltos y agregó: "Mi conciencia está limpia, a Medina nunca le pasó por su mente venderse.. mi país número uno es Panamá, yo nací y crecí aquí".
SU PRESENTE
Ahora la idea es lavar su imagen y ganarse la confianza del técnico Alexandre Guimaraes para disputar su tercera eliminatoria con Panamá.
"He trabajado fuerte para recibir esta oportunidad, he mejorado mucho en la parte física y me siento con muchas ganas de dar mi granito de arena".
El habilidoso mediocampista confía en que la experiencia de la pasada eliminatoria sirva para no cometer los mismos errores y clasificar por primera vez a un mundial.
"Tenemos un grupo que tiene más experiencia.. confío en que en esta ocasión las cosas van a ser distintas", concluyó.
