Dolientes colocan flores frente a las fotos a los niños que fallecieron en el derrumbe de la escuela primaria número 2 de Fuxing, en el terremoto que el pasado día 12 afectó a la provincia china de Sichuan, durante una protesta ante la sede del Gobierno para pedir una investigación sobre si la construcción del edificio había sido correcta, en Mianzhu, China .
La cifra oficial de muertos ha alcanzado los 70.000, mientras la alerta continua en la provincia ante el temor de que se desborden los lagos formados por el sismo, pese a que ayer finalizaron las obras para drenar el lago Tangjianshan.