Alejandro López Salinas, alias "Cholo Alejandro", se transportaba como pasajero a bordo de un taxi en las inmediaciones de la Calle 6ta. de San Felipe, frente al Parque Catedral, cuando una unidad del Sistema de Protección Institucional lo requisó encontrándole un revólver calibre 32 marca Taurus, con 6 municiones en el arma, y 6 en el bolsillo.
López Salinas no tenía el debido permiso del arma, por lo que fue conducido ante las autoridades para investigación.