Los Yanquis de Nueva York perdieron ayer con los Azulejos de Toronto 10 carreras por 4, pero lo más feo estuvo en la pelea campal que sostuvieron los dos equipos en el octavo episodio.
Las grandes estrellas estuvieron enfrascadas, pero el que peor salió fue el receptor yanqui, Jorge Posada, quien recibió varios golpes y se le vio en el piso en medio del problema de golpes.
Este tipo de peleas no les convienen a los Yanquis, quienes ya están clasificados y piensan en la siguiente ronda, mientras que Toronto no está jugando por nada.
Andy Pettitte fue otro de los que más participó en el combate campal que se realizó en el cuadro interior, como es característico en este tipo de peleas en las Grandes Ligas.
Los jueces del partido intentaron calmar los ánimos pero no fue fácil ya que los equipos estaban muy molestos y el enfado parecía que sólo se resolvería a punta de golpes durante este cotejo.
Al panameño Mariano Rivera se le vio por la televisión, sin embargo no participó en ningún tipo de pele durante la batalla.
NO PELEAS
Lo normal es que se le de sanciones a los que fueron creadores de la pelea. Aunque no son tan fuertes en las Grandes Ligas.
