Hace una semana que el puesto de Policía en el corregimiento Mendoza, está cerrado debido al retiro de las dos unidades de la Policía Nacional que vigilaban el área.
Las estructuras-según una fuente-resultaban peligrosas para los policías por lo agrietado de las paredes, el mal estado del techo y las condiciones poco sanitarias de las letrinas.
Una situación similar podría suscitarse en el corregimiento de Playa Leona, donde la comunidad cortó el suministro de electricidad y agua a la estación de Policía.
Los dos policías que permanecen en el lugar están sin los servicios básicos. Se desconoce cuándo se dará la orden de abandonar la sede.
La suspensión de los servicios de electricidad y agua, sufragados por la comunidad, fue adoptada días después que manifestantes de Playa Leona fueron desalojados de la carretera Interamericana, la cual habían cerrado exigiendo la reparación de la carretera.