El Tribunal Popular del Distrito de Xicheng, en Pekín, sentenció a un hombre a permanecer 30 meses en prisión y a pagar una multa de más de 51.600 euros (unos 65.500 dólares) por la reventa de más de 500 entradas para los Juegos Olímpicos, disputados en la capital china el pasado mes de agosto.
La agencia oficial de noticias, Xinhua, informó ayer de que se trata del mayor juicio por reventa de boletos para los Juegos de Pekín.