Los transportistas de carga mantienen paralizada la frontera de Panamá con Costa Rica, como medida de presión para exigir un aumento en el flete que cobran por trasladar la mercancía procedente de Zona Libre de Colón a los países centroamericanos.
Manuel Mora, presidente de la Cámara Nacional de Transporte de Carga, explicó que la medida obedece a que los altos costos que tiene el diesel hacen insostenible la actividad, por lo que exigen a los clientes un aumento en el flete.
Por el traslado de mercancía desde Panamá a Costa Rica por cada contenedor se cobra $1,100; a Nicaragua $2,000; a Guatemala $3,500; El Salvador $2,600; a Honduras oscila entre $2,400 a $2,800 dependiendo el lugar de destino.
En estos momentos están exigiendo para Costa Rica un aumento del 30% del costo actual, para Nicaragua el 17% y para Honduras, Guatemala y El Salvador un incremento del 15%.
Señaló que actualmente el costo por kilómetro recorrido es de 57 centésimos y exigen que se les pague 80 centésimos.
Destacó que se trata de un paro de brazos caídos en el que solo pueden entrar los camiones que vienen de Centroamérica, pero no hay salida para ningún nacional ni extranjero que se encuentre en el territorio panameño.