La Constitución, principal traba para reformar sistema migratorio
Donald Trump se ha topado en su ofensiva migratoria con los márgenes de la Constitución para frenar la puesta en marcha de sus órdenes ejecutivas.
El presidente estadounidense, Donald Trump, se ha topado en su ofensiva migratoria con los márgenes de la Constitución: organizaciones defensoras de derechos civiles y autoridades de estados demócratas han recurrido a las leyes para bloquear o frenar la puesta en marcha de sus órdenes ejecutivas.
El primer revés le llegó el jueves, cuatro días después de que iniciara su segundo mandato. Un juez federal de Seattle consideró «claramente inconstitucional» el decreto por el que prevé acabar con la ciudadanía por nacimiento para hijos de inmigrantes indocumentados o con un estatus temporal.
Trump frente a la Enmienda 14 de la Constitución
El magistrado John C. Coughenour la pausó durante 14 días, pero sentó las bases de una dinámica que podría repetirse estos próximos cuatro años: grandilocuentes anuncios de medidas seguidos por una batería de demandas en las cortes, que aboca los planes de Trump a dirimirse en el Tribunal Supremo.
«Trump no es más que un showman, desempeña el papel de presidente con dramatismo. Su estrategia consiste en lanzar el máximo de cosas posible y ver qué puede conseguir», explica a EFE Justin Crowe, profesor de Ciencias Políticas en la universidad Williams College.
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La Enmienda 14 de la Constitución establece que toda persona nacida en suelo estadounidense obtiene automáticamente la nacionalidad, independientemente del estatus migratorio de sus padres.
«No me sorprende ese juez», dijo Trump después de que se conociera la resolución del magistrado recordando ese principio. Coughenour actuó en respuesta a una demanda de cuatro estados, paralela a una interpuesta por otros 18.
Trump y el objetivo de acabar con la ciudadanía por nacimiento ha sido el que más eco ha recibido tras su llegada al poder, pero no el único que pone a prueba el statu quo y la Constitución. Planea sustituir por ejemplo con un aumento a los aranceles el impuesto sobre la renta, cuya creación requirió la ratificación de la Décimo Sexta Enmienda en 1913.
Las primeras órdenes ejecutivas
Trump antes de iniciar este segundo mandato, en su meta por recortar gastos no descartó no gastar dinero asignado ya por el Congreso, y ha bromeado además con seguir en el poder por tercera vez, aunque la Constitución limita a dos los ejercicios de los presidentes. El legislador Andy Ogles ha elaborado ya un borrador para intentar ampliar ese tope.
Y en la puesta en marcha de algunas de sus promesas de campaña no ha dudado en montar un espectáculo a su alrededor.
La firma por ejemplo de sus primeras órdenes ejecutivas tuvo lugar en el estadio Capital One Arena de Washington el día de su investidura ante unas 20.000 personas que recibieron cada ratificación con ovaciones.