¡Yo no ordené matar a Giroldi!

El exgeneral Manuel Antonio Noriega soltó ayer algunos de los secretos que se guardó por 27 años. "Yo no ordené matar al mayor Moisés Giroldi ni la Masacre de Albrook, donde fueron fusilados 10 golpistas, entre ellos, el capitán León Tejada", exclamó el convicto militar en medio de una audiencia de cumplimiento en la sede del Sistema Penal Acusatorio, en Plaza Ágora, donde estaban presentes familiares de las víctimas.

Eso fue lo que dijo el ex hombre fuerte de Panamá en fuerte tono militar, que motivó que el juez Roberto Sánchez, que luego aprobó su arresto domiciliario, le exigiera bajar el tono.

“Con mi corazón bajo el nombre de Dios digo, no tuve nada que ver con las muertes de estas personas, que cualquier palabra que no sea cierta, que algo negativo caiga sobre mí”, manifestó Noriega mirando directo a los ojos de los hijos de Giroldi y Tejada.

“Yo no maté a Giroldi. Lo mataron sus amigos, y si miento, que me caiga el castigo de Dios”, expresó Noriega, de 82 años,  quien estará probablemente desde hoy en el apartamento de su hija Sandra, mientras se prepara para una cirugía de un tumor cerebral.

Josue Giroldi, hijo de Moisés, expresó su perdón hacia Noriega, todo lo contrario a Javier Tejada, hijo del capitán León Tejada.

“Fueron los amigos de Tejada los que lo mataron, que su odio y rencor vaya contra ellos, yo impedí que se matara gente…había una conspiración en mi contra y la asumí de frente”, respondió Noriega, quien reclamó que nunca se le ha permitido expresar nada sobre los hechos.

Gran parte de los involucrados en el golpe del 3 de octubre de 1989 eran oficiales graduados en la Academia Militar de Nicaragua y algunos tenían apenas tres días de haber regresado de Namibia, tras cumplir una misión de paz.

Algunas fuentes indicaron que paralelo al golpe de Giroldi se gestaba otro –el de los “chiricanos”-, donde estarían involucrados oficiales muy cercanos a Noriega y al aparato de inteligencia norteamericano, que pudieron estar en control de la situación en medio de todo el escenario reinante, tras sofocar la rebelión del 3 de octubre.

Giroldi fue asesinado en el cuartel de Tinajitas; en los hangares de Albrook fueron fusilados León Tejada, Juan Arza, Edgardo Sandoval, Eric Murillo, Jorge Bonilla,  Ismael Ortega, Francisco Concepción,  Feliciano Muñoz y Deóclides Julio.

Los familiares le reclamaron a Noriega que diera los nombres de los oficiales que mataron a sus familiares. Josue Giroldi y Javier Tejada lloraron en medio de la audiencia debido a la gran carga emocional del momento.

Tejada fue más duro, qué diga los nombres de esa manada de criminales…tirano, cómo mataron a gente encapuchados y esposadas, añadió.

El juez de cumplimiento determinó que Noriega regresara anoche a El Renacer, tras el término de la audiencia de casi cuatro horas. Hoy debe darse otra audiencia similar que tiene que ver con otro caso en que el Noriega fue condenado en ausencia: la decapitación de Hugo Spadafora.

Noriega lleva ya casi 10 mil días en prisión, pero se da por descontado que hoy volverá a su antiguo barrio: San Francisco, pero no a su antigua mansión, sino a un apartamento de su hija Sandra Noriega, en calle 79 San Francisco.