La tensión política ecuatoriana ha entrado en un compás de espera ante la posibilidad de que la oposición y el oficialismo logren un acuerdo para reestructurar la Corte Suprema.
El centenar de diputados del unicameral Parlamento discutieron por largas horas sobre una fórmula para consensuar una reforma a la Ley Orgánica de la Función Judicial, con el fin de cesar a la actual Corte Suprema, sobre la cual pesan sospechas de ilegitimidad.