El PSV Eindhoven se proclamó ayer campeón de la Copa RZD (Ferrocarriles de Rusia) al derrotar al Real Madrid por 2-1, en un partido en el que al equipo blanco le faltó pegada.
Un golazo desde fuera del área del centrocampista del PSV, Aissati, y otro de falta directa de Afellay al final de la primera parte pusieron al descubierto las carencias del Real Madrid en la creación y en las bandas.
En la segunda parte, con la entrada de Guti y Robinho, el Real Madrid mejoró sensiblemente y, en el minuto, 58 Saviola aprovechó una jugada ensayada para acortar distancias.
El equipo blanco dominó el resto del partido y dispuso de varias claras ocasiones de gol, como un balón al larguero que lanzó Guti en un golpe franco, pero el portero brasileño del PSV, Gomes, abortó la mayoría de las intentonas madridistas.
El técnico merengue, Bernd Schuster, que sacó de principio a Raúl y Saviola de delanteros, probó en el centro con Gago y De la Red, pero estos se vieron superados claramente por los centrocampistas holandeses, mucho más experimentados.