El común de la gente piensa que cuando uno supera la barrera de los setenta años tiene que olvidarse del sexo y debe vivir los últimos años de su vida tratando de compartir otros placeres con su pareja. Pero una reciente encuesta hecha en los Estados Unidos arroja por tierra estas creencias y saca a la luz resultados que sorprendieron a más de un estudioso del tema.
La investigación fue realizada por reconocidos científicos y publicada en el New England Journal of Medicine, y termina con la idea de que la búsqueda de placer físico solamente es patrimonio de los jóvenes. Se trata de la primera encuesta nacional completa de actitudes, conductas y problemas sexuales de los adultos estadounidenses mayores de 57 años, que encontró que muchos tienen relaciones sexuales con frecuencia. De hecho, la frecuencia de la actividad sexual disminuyó entre el final de la cincuentena y el comienzo de la setenta.