El roquero mexicano, Carlos Santana, planea dejar de lado su carrera musical en seis años, para poder dedicar su tiempo a la Iglesia, comentó.
El gran guitarrista, de 61 años de edad, se ha volcado en la religión para sobrellevar sus momentos más difíciles, incluyendo su divorcio el año pasado de su esposa desde hacía 34 años, Deborah.
Afirma que ahora quiere servir a su fe, convirtiéndose en cura de una iglesia en Maui, Hawai.