Licenciado
Juan Pritsiolas
Director del diario Crítica
Ciudad
Respetado director:
Por este medio, yo José Navarro Rojas, portador de la cédula No. 8-295-735 deseo hacer réplica a la noticia que en su periódico se publicara el día 16 de noviembre del presente año, con relación al hecho de que este hijo de Dios goza de un permiso laboral extra-muro.
Fui sancionado por un tribunal que no supo entender ni analizar correctamente la prueba de mi inocencia.
He sido incluso el más sorprendido con esta noticia, cuando después de tantos años de encontrarme privado de mi libertad y habiendo respetado siempre las reglas del sistema penitenciario, se me evaluó y se me permitió un permiso de libertad laboral que en cualquier país civilizado es tema de política del desarrollo humano.
Si algún día cometí errores ante los ojos de Dios, de la sociedad y de mi familia he pedido perdón, pero también es justo que sepan quienes me juzgaron, que de mis labios nunca he olvidado el sabor amargo del dolor de estar detenido, como tampoco las ganas de seguir gritando que sigo siendo inocente ante Dios.
Todavía no encuentro palabras al deseo de personas con ese poco sentido de lo que significa la palabra humildad, menos de quienes no creen en la parte humana de cada hombre, lo único que puedo expresarle es que sigo cumpliendo con todas las exigencias que se nos piden en el sistema penitenciario, sólo me resta decirle que Dios se encargue y tenga misericordia por aquellos que nunca han creído en la reivindicación del hombre ante la sociedad.
Atentamente,
José Navarro Rojas
