Los Ng�be Buglé, una cultura sumergida en medio de la cordillera central de Panamá que abarca las provincias de Veraguas, Chiriquí y Bocas del Toro se distinguen por sus populares tradiciones.
A pesar que la balsería se ha perdido un poco en la actualidad, los ancianos indígenas se esmeran por efectuar este deporte característico que demuestra habilidad y fortaleza.
De acuerdo con personas conocedoras de la actividad, la balsería consiste en una fiesta que recoge a indígenas de diferentes comunidades que tardan varios días caminando para llegar al lugar.
Entre chicha fuerte y celebraciones, dos indios con balso (palo de 1.5 metros aproximadamente de largo), se disputan una lucha en la que el propósito es golpearse los tobillos con los bastones de manera, el que cae al suelo es el perdedor.
Sin embargo, el ganador con esa demostración de valentía puede conquistar a cualquier jovencita soltera para que sea su cónyuge.
Cabe destacar que este deporte data de muchos años atrás y que aún se continúa practicando como una de las tradiciones del pueblo Ng�be.
Por otro lado, aprovechan el momento para bailar el Caracol. Es un baile en el cual un anciano de la comunidad canta una canción en nombre de la naturaleza en lengua original.
Posteriormente, determinado grupo de indígenas intercalado entre hombres y mujeres se colocan en fila y comienzan a bailar. Un paso adelante y otro hacia atrás van haciendo un círculo hasta completar la forma de un caracol, esto puede tardar toda una noche.
Luego zapateando en el suelo abren nuevamente el círculo hasta completar la fila.