Cubano La Cruz se mete en la final
Inteligencia sobre fuerza. Así sintetizó Julio César La Cruz su victoria de este martes contra el francés Mathieu Bauderlique y convertirse en el primer pugilista cubano en avanzar a una final en lo que va del boxeo en los Juegos Olímpicos de Río Janeiro.
La Cruz cumplió cabalmente los pronósticos y se impuso por decisión unánime (3-0) en la categoría de los semipesados a Bauderlique, uno de los boxeadores en Río más temibles por su fuerte pegada y que en su pelea previa noqueó al ecuatoriano Carlos Mina.
Con esos antecedentes, La Cruz utilizó lo que sabe hacer: Correr en el ring, pelear a media distancia y pararse de vez en cuando para conectar golpes seguidos. Uno de sus jabs directos le causó al francés una herida en la ceja derecha.
"Es un boxeador que depende de su fortaleza", dijo La Cruz. "Desde pequeño he aprendido que la inteligencia supera a la fuerza".
Es por eso que el cubano prefiere que le llamen el "Doctor" y no la "Sombra" del ring.
La Cruz, de 27 años, es una de las cartas fuertes cubanas para alcanzar oro después de haber sumado tres títulos mundiales y quedarse corto en Londres hace cuatro años.
Su pase a la final alegra a una poderosa delegación cubana que había sufrido la eliminación de cuatro de sus 10 boxeadores, incluyendo a tres que eran candidatos para llegar a la final.
El martes, poco después de la clara victoria de La Cruz, un quinto cubano fue eliminado, Leinier Pero, en la división de los súper pesados (más de 91 kilogramos). El cubano ganó el primer asalto, pero en el siguiente fue noqueado por el croata Filip Hrgovic con un potente gancho de derecha al rostro.
Cuba llegó con pugilistas en las 10 divisiones y con el objetivo de mejorar su cosecha de dos oros alcanzada en Londres 2012.
La tanda matutina del martes fue bastante sangrienta, ya que en cerca de la mitad de las nueve peleas, incluyendo de mujeres, alguno de los contrincantes salió del ring con algún corte.