¡Se agitan las aguas!

El exmandatario Ricardo Martinelli regresa a Panamá mañana tras permanecer 1,228 días fuera del país, gran parte en Miami, donde estuvo 364 días detenido a petición del gobierno varelista que reclamaba su extradición por el caso de los pinchazos.

Su caso más que jurídico al final tendrá una salida política. El controversial Martinelli –para bien o para mal- es la única figura en el escenario nacional que genera pasiones.

El solo anuncio de su retorno opacó todo el resto de los eventos y figuras de la nación. Se quiera o no, su presencia en pleno año electoral –ya sea suelto o en prisión- representa un factor influyente.

Con una campaña electoral sin liderazgos fuerte, la presencia de Martinelli remueve el ajedrez político, porque en todas las encuestas realizadas revelan que se le considera el líder de la oposición panameña.

Martinelli parece un muñeco porfia’o. Ni la andanada que le dio el gobierno armándole toda clase de procesos, ni las horas en televisión que se dedicaron para desgastar su imagen y las primeras planas impresas tildándolo de corrupto, parecieron afectar su popularidad en una gran base popular, sino que más bien lo victimizaron.

Mañana bien temprano cuando llegue en un vuelo chárter, el gobierno tendrá dos opciones: exhibirlo como trofeo, pero en una guerra que ya está perdiendo, o introducirlo en silencio para reducir una inevitable exposición mediatica de Martinelli.

A su llegada bien puede ser llevado a una revisión médica o directo a la Corte Suprema de Justicia, que debe determinar si se mantiene o no la detención provisional, que fue ordenada por el  pleno, pero solo para lograr su extradición.

Martinelli regresa y por allí mismo sale el mandatario Juan Carlos Varela rumbo a Rusia, solo faltaría que se encuentren en el aeropuerto de Tocumen, para darle cariz de novela a lo que sucede en Panamá.

“El Loco” ni siquiera se ha bajado del avión y ya demostró que dará la batalla.

"Varela interfirió en todo mi proceso de extradición...ni siquiera permitió que me acompañen mis abogados de regreso a Panamá…ni cambiarme de ropa", expresó en carta de su puño y letra.

Además denunció que la vicepresidenta Isabel de Saint Malo y la funcionaria de Cancillería Fara Diba Urrutia, que quiere ser magistrada d la Corte, no están cumpliendo lo pactado.

El Departamento de Estado advirtió que a Martinelli se le extradita solo por el caso pinchazos y que se le deben garantizar sus derechos humanos.

El exmandatario reiteró que se le acusó sin imputar; me acusan falsamente de pinchar y de la pérdida de un software vencido, exclamó.

“El Loco” no se guardó nada. Acusó al magistrado fiscal Harry Díaz de mandarle mensajes pidiendo coima de $13 millones para él y las supuestas víctimas. Además afirmó que le prometieron no juzgar a su hermano el exministro Javier Díaz, por haber recibido 3 apartamentos de una coima de un pariente del “famoso tío”.

Según Martinelli, el presidente "Varela ha dado órdenes a la Corte Suprema de Justicia que me metan preso en un caso fabricado, sin evidencias, sin prueba alguna donde me violaron todos mis derechos legales".

Carlos Zavala reconoce lo minucioso que es Varela. Recuerdan a quién quería el Ejecutivo para reemplazar al magistrado de garantías Jerónimo Mejía?: nada menos que a Zuleyka Moore. ¿Entienden ahora por qué tanta insistencia?

Varela también lanzó el 30 de mayo un decreto y con inusitada rapidez lo promulgó: el que crea centros especiales de detención para sujetos peligrosos…sin duda para su gobierno, un carismático Martinelli, es un hombre de cuidado.

 Adelantándonos, mañana Martinelli puede ser llevado a primera hora hábil, ante el Magistrado de Garantías, Jerónimo Mejía, quien solicitó la extradición.

La defensa, fiscal y querellante solicitarán audiencia ante el Pleno de la Corte Suprema de Justicia, para que se revise lo de su detención provisional.

Pero hay un elemento que favorece a Martinelli. De acuerdo a la Ley, la detención provisional de un diputado no puede exceder de un año y éste ya tiene ese periodo bajo arresto, que aunque se cumplió en Miami, fue originada por una decisión del pleno de la Corte Suprema de Justicia de Panamá, a pedido de un Magistrado Fiscal de Panamá por un proceso penal que se adelanta en Panamá.

Sin duda que el retorno de Martinelli le revuelve el país  al gobierno, que ya no controla a su antojo al resto de los órganos del Estado que fueron sus aliados.

Varela está en plena guerra abierta con la Asamblea y no podrá controlar la nueva junta directiva legislativa, el gobierno se está quedando sin plata para sus proyectos, el Panameñismo marca bajó en las encuestas  y la economía v en picada.

Ya importantes cuadros del gobierno están saltando del barco. Hay desconfianza de EEUU por el manejo de Varela en la relación con China.

N se descarta que el retorno de Martinelli sea un mensaje para Varela, de enviar de vuelta a una figura no hostil a los EEUU y alguien con gran carisma en el pueblo panameño

Al regresar Martinelli, puede consolidar a Cambio Democrático como el partido más popular y abriendo una opción de triunfo para el 2019.

El hombre de las zapatillas del pueblo ya levanta pasiones, pero un mensaje como encriptado enviado por el exmandatario Martín Torrijos, puede dar salida a todo lo que se viene.

“La llegada del expresidente Ricardo Martinelli pone a prueba nuestra institucionalidad cuando existe una lucha por el poder reflejada en el enfrentamiento entre órganos del Estado. Está en juego el futuro y la capacidad de encontrar soluciones a nuestras diferencias, dentro de un marco institucional capaz de construir y no solo destruir", añadió.