Estan cansados de ser engañados por el Idaan, que no resuelve el problema de falta de suministro de agua por varios días.

Han hecho gestiones con el Municipio de Arraiján, pero estos hacen caso omiso al llamado de la comunidad.

Alegan que el líquido, de color chocolatoso, parece agua de una charca y sabe a tierra y que la cosa no está como para andar comprando agua embotellada.

Los denunciantes aseguran que a la fecha ya se reportan varios robos perpetrados por estos delincuentes que cometen esta fechoría para que los conductores reduzcan la velocidad o se detengan a ver qué le ocurrió al vehículo.

Conductores que a diario deben transitar por esa importante arteria vehicular de la ciudad capital, aseguran que ya son varios los automóviles que se han accidentado, porque han caído en el hueco.

Cansados de padecer por esta situación y no poder utilizar el agua que se supone debería ser potable y apta para el consumo humano, los afectados decidieron denunciar públicamente lo que deben soportar a diario.

Sustentan que los huecos o baches que tiene la vía, parecen más bien cráteres de la Luna, por lo cual le piden al Ministerio de Obras Públicas (MOP), gestionar los fondos para repararla.

Denuncian que las vías del acceso al sector se encuentran en muy mal estado, por lo que las personas deben arriesgar sus vidas para poder salir de la zona.

El domingo ocurrió una situación similar, pero ese día lo que más afectó a los residentes fue el desbordamiento de las aguas servidas cargadas de heces fecales, las cuales que quedaron esparcidas por la vía principal de la barriada.

En las imágenes captadas por la cámara de un sistema de videovigilancia de una de las residencias se aprecia cuando los sujetos llegan en un vehículo tipo sedán, se bajan, y se aproximan a un carro .

El problema afecta a los residentes del sector y al área de patios y talleres del metrobús, de Ojo de Agua, ya que cuando el caudal de la quebrada se incrementa, inunda el lugar y no se puede caminar.

En imágenes compartidas por los quejosos se aprecia que además del muro de contención, hay varillas de metal enterradas justo frente a una de las alcantarillas que permiten la circulación del agua de una quebrada que hay en el lugar.

En las imágenes compartidas por los quejosos se aprecia que en la parada se ubicó una tolda para que los usuarios del transporte colectivo se guarezcan del sol y la lluvia, pero la misma se ha deteriorado con el paso del tiempo y ya no cumple con su objetivo.

En muchos de los casos las vías están intransitables, ya que han perdido la carpeta asfáltica, y en otros los caminos de penetración ni siquiera han sido cortados.