�Quién quebró el vaso que estaba en la nevera? �Quién mandó el e-mail con virus que afectó a todas las computadoras? �Quién entró a la casa con los pies sucios? �Quién te preñó? �Quién habló en contra de él? �Quién le faltó el respeto a fulano? �Quién inventó tal bochinche? Podemos seguir enumerando miles de preguntas para conocer a un sujeto que cometió una acción en particular, pero es duro decirlo que miles de personas se refugian en el silencio porque no se atreven a decir "fui yo".
Aceptar la culpa es de caballeros. Nadie debe refugiarse en el anonimato para ir cantando esa canción infantil que dice: "yo no fui, fue Pepé, pégale, pégale que ella fue..."
Qué le cuesta a la gente aceptar que cometieron un error. No quita nada con dar un paso al frente y enfrentar la sanción que cabe, dependiendo de la magnitud de la falta.
Si usted está en estos momentos pasando agachado sin decir la verdad por cualquier problema o cagada que cometió, debe llenarse de valentía y acabar con ese dilema de una vez, porque, si le da larga al asunto, tal vez podría agravarse y sería peor la vaina.
Un panameño da la cara en los momentos de crisis. Sea usted un excelente ciudadano y dígale a esa persona que está afectada por algún situación que usted fue, pero que lo lamenta mucho y prometa que más nunca volverá a suceder.
Si todos decidieran a dar el paso, cientos de problemas hoy día se solucionarían con una sonrisa en la cara y tal vez con una gran amistad.
�Demos el paso ya!