Noticias - 15/7/16 - 12:00 AM

Independiente de mente y espíritu

Por: José I. Huertas F. / EVA jose.huertas@epasa.com -

Por varios años fue anchor de noticias, catalogada por muchos como una dama con porte y elegancia, pero sobre todo por ser una mujer intachable, nos referimos a Lissette Condassin.

Esta actriz, cantante, locutora, esposa, madre y comunicadora nos narra parte de su vida.

Una mujer como todas. Con sueños, aspiraciones, ilusiones, aciertos y desaciertos, pero que le encanta su vida, le encanta todo el camino que ha recorrido y sobre todo lo que ha disfrutado en el trayecto.

Optimista, muy activa. Me gusta siempre dar la milla extra y meterle pasión a lo que hago. Enamorada de mi familia y del hogar que hemos construido mi esposo y yo para criar a tres bellas y talentosas hijas. Me considero una mujer independiente de mente y espíritu, entregada a mis creencias y defensora de la justicia social y las buenas causas. Eterna enamorada del teatro, la música, del arte y la cultura en general y que disfruta dar calidad de tiempo a su familia y amistades cercanas.

Ja, ja, ja. Creo que es genético, herencia de mi madre, tal vez. Ella siempre se vio más joven de su verdadera edad. Pero si me lo preguntas en serio, te podría decir que la fuente de la juventud está en un conjunto de acciones puntuales: hacer lo que te apasiona, mantenerte ocupado haciendo lo que disfrutas hacer. La otra cosa puntual, yo diría que es vivir tu vida enfocándote en lo positivo, sin hacerle o intentar hacerle daño a nadie y viviendo para hacerte feliz a ti primero, para luego hacer felices a los que te rodean.

Mi pilar fundamental #1 es mi familia, ese es mi norte. Mis hijas, mi mayor orgullo. Mi esposo, mi mayor apoyo e impulso. El trabajo honrado, la honestidad, la paz mental, la tranquilidad espiritual y la conciencia tranquila.

Fuera del cliché que pueda ser lo que voy a decir, de todas mis facetas la que más me ha llenado como persona es y será por siempre, el ser mamá de mis maravillosas tres hijas. Yo he disfrutado plenamente con ellas cada segundo de sus alegrías, sus penas, sus talentos, sus logros y fracasos, he crecido con ellas y he vuelto a vivir con ellas cada etapa de la vida.

No, jamás. Yo amo mi país, mis costumbres, mi calorcito panameño, mi estilo de vida. Fuera de mi país seré una perfecta desconocida. Aquí tengo el cariño de la gente que todavía hoy día, después de muchos años de haber dejado la televisión, me saludan por la calle con mucho cariño, no importa en qué lugar de la República me encuentre, no me puedo esconder en ningún lado. Eso no tiene precio.

Que le pongan corazón a lo que hagan. Más allá de las luces, las cámaras y la fama que puede ser efímera, se debe buscar la razón de las cosas y ponerle un sentido humano a todo lo que hagas. Ese es mi mejor consejo. A mí me funcionó.

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