Cirugía bariátrica mejora la calidad de vida

En Panamá, más del 46% de la población mayor de 40 años tiene algún grado de sobrepeso y obesidad, y según informes del Censo de Salud Preventiva del Ministerio de Salud para el 2025, puede que el país ocupe el segundo lugar en Latinoamérica con mayor índice de obesidad.

El índice de masa corporal (IMC) es el indicador que se utiliza para determinar si una persona tiene sobrepeso u obesidad. La obesidad se diagnostica cuando este índice es igual o mayor que 30. Este número se calcula dividiendo el peso en kilogramos (kg) entre la estatura en metros (m) al cuadrado. En el caso de la obesidad extrema o mórbida, el índice de masa corporal es igual o mayor que 40.

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Según explica la doctora Debbie Wong, especialista en cirugía bariátrica y metabólica, “la cirugía bariátrica es la única alternativa en la actualidad que trata de manera eficaz la obesidad mórbida en personas para quienes medidas más conservadoras como la dieta, el ejercicio y los medicamentos no han logrado los efectos óptimos”.

En nuestro país, para aquellas personas con obesidad mórbida que quieren bajar de peso y cambiar su estilo de vida, existen diferentes alternativas dentro de la cirugía bariátrica, y la más frecuente es la manga gástrica, procedimiento mediante el cual se engrapa una parte del estómago reduciendo la cavidad estomacal, lo que hace que el paciente al comer quede inmediatamente satisfecho, lo que permite de forma efectiva la pérdida de peso y provoca cambios importantes en su metabolismo.

Hoy en día, la mayoría de las operaciones para perder peso se hacen a través de laparoscopia, esta es menos invasiva que las intervenciones “abiertas”, lo que genera menos dolor posoperatorio, minimiza las complicaciones de las heridas, reduce la duración de la estadía en el hospital y el paciente tiene la posibilidad de reincorporarse más rápido a su actividad normal.

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Debbie Wong considera que la clave del éxito del procedimiento está en el seguimiento médico y los cambios de hábitos que debe realizar el paciente tras la cirugía: “es importante brindarle seguimiento cercano a cada paciente de forma personalizada, durante el primer año y periódico los años posteriores con la finalidad de asegurar un avance satisfactorio”.

La cirugía bariátrica no solo favorece la pérdida de peso, sino que también contribuye de manera importante a resolver comorbilidades asociadas con la obesidad y a mejorar la calidad de vida de los pacientes disminuyendo el riesgo de mortalidad.