Aunque otras provincias tienen sectores donde se cuenta con clima fresco, el Volcán Barú -que es el punto más alto de la república de Panamá, ubicado en Chiriquí- da a esta provincia el derecho de contar con la temperatura más fría del país.
Boquete, Volcán y Cerro Punta son los sitios más conocidos de las tierras altas chiricanas y los que más han sabido desarrollar el turismo; sin embargo, existen otras regiones que también tienen su atractivo.
El distrito de Renacimiento es un ejemplo claro, donde también la mayoría de su territorio es de tierras altas, con buen clima y paisajes extraordinarios, al igual que Potrerillos, Boquerón y algunas zonas del oriente chiricano, entre otros.
A pesar de que son las tierras altas (por el clima) la región que más llama la atención de turistas nacionales y extranjeros, en Chiriquí se ha empezado a desarrollar con éxito el turismo de tierras bajas.
Con la hermosura de sus playas como mejor presentación, la región chiricana se ha ido convirtiendo en un contorno perfecto para quienes buscan frescura en los bosques y montañas o el sol de playas, ríos y esteros que encantan a través de las actividades que ofrecen.
Por décadas la playa de Las Lajas en San Félix y La Barqueta en Alanje simbolizaron la carta de presentación de las tierras bajas de Chiriquí, sin embargo, ahora se presentan otros nuevos panoramas.
Estero Rico es una de las playas que cada día está atrayendo más visitantes de acuerdo a las inversiones que se están realizando para llegar hasta ese territorio del distrito de Alanje.
No obstante, ahora el corregimiento de Boca Chica, dentro del distrito de San Lorenzo, se lleva el primer lugar en cuanto al desarrollo del turismo en sus islas.
Actualmente esta región, que abarca gran parte del golfo de Chiriquí, cuenta con cinco hoteles, distribuidos por sus diferentes islas, dos villas en construcción y una cantidad considerable de residencias privadas.
Todas estas construcciones han significado inversiones millonarias, nacionales y extranjeros.
Isla Boca Brava, Punta Bejuco, Bolaños, Games, Muertos, Paridas e Isla Seca son solo algunos de los lugares que forman parte del grupo turístico que se ha establecido en Boca Chica, donde los residentes del pueblo cabecera no pasan los 500 habitantes.
El desarrollo del turismo en la provincia de Chiriquí va de la mano de una oferta que implica lo que cualquier visitante quiera desarrollar mientras se encuentra en este territorio.
Hay hoteles con atractivos citadinos, como los que ofrecen tranquilidad con el sonido de un río, cabañas metidas en el bosque, montaña o simplemente a orillas de una carretera que te lleva hasta los siembros de legumbres y verduras.
Se pueden observar aves y paisajes llegando en un carro hasta algún lugar, o caminando por horas en aventuras que ofrecen senderos ecológicos, con baños de aguas termales.
Un paseo en lancha es obligatorio para llegar hasta una de las más hermosas islas del golfo chiricano, donde además de la belleza de la zona, en temporadas especiales se puede ver de cerca las ballenas, delfines y las más grandes tortugas, entre otras especies de animales.
Dentro de algunas de las playas, se puede llegar fácilmente manejando un automóvil a través de calles asfaltadas.
Para el deporte turístico, tierras altas y bajas tienen ofertas como el canopy tour, paseos en bicicleta, river rafting, surf, entre otros.
Los mejor de todas las actividades que cualquier turista quiera realizar es que todo está relativamente cerca, dependiendo de los lugares que desee visitar.
Con un buen itinerario, una persona podría divertirse en un mismo día con las actividades que busca en las playas, los paseos y aventuras de sectores más altos.
Aunque cada región de nuestro país tiene su atractivo y miles de ofertas turísticas, la elección de Chiriquí para unas vacaciones o un simple paseo es la que más se puede tomar en cuenta por la multiplicidad de actividades en escenarios diferentes.