Golazo - 10/6/14 - 01:17 AM

VALDANO y el análisis de los favoritos del Mundial

El exjugador y extécnico hace un repaso de la actualidad de las selecciones de Argentina, Brasil y España, consideradas las favoritas para el Mundial 2014.

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El exjugador y extécnico hace un repaso de la actualidad de las selecciones de Argentina, Brasil y España, consideradas las favoritas para el Mundial 2014.

Tras toda una vida vinculado al mundo del fútbol y después de haber levantado la Copa del Mundo de 1986, su análisis de lo que se puede esperar de Brasil 2014 se antoja indispensable.

En una distendida charla, Jorge Valdano disecciona a algunas de las principales selecciones que se postulan como firmes candidatas a alzarse con la Copa del Mundo Brasil 2014.

Han pasado casi 30 años desde el último Mundial disputado en Sudamérica. Qué recuerdos, ¿no?

Es una referencia atroz del paso del tiempo. Tengo tan nítidos los recuerdos que si me dicen qué pasó hace cinco años estoy más dispuesto a creerlo. Y en términos de usos y costumbres, la distancia es todavía mayor. Desde entonces, el fútbol se convirtió en otra cosa. Y el futbolista también. En el 86 hubo un pionero, un primer héroe, que fue Maradona. En aquel Mundial, Maradona desató cientos de artículos intelectuales en todo el planeta y más de cien canciones. En el 86, que un futbolista interesara a grandes intelectuales empezaba a conducir al fútbol hacia otra dimensión. Ese fue el último Mundial romántico, pero también el que creó el antecedente del nuevo fútbol.

¿Qué espera de Brasil 2014?

Hay dos influencias que yo creo son buenos antecedentes. Primero, el título de España en el último Mundial, porque lo hizo defendiendo un fútbol de alta calidad. Y segundo, el hecho de que se juegue en un país que tiene una sensibilidad especial por el fútbol artístico. Y tenemos un freno a esas expectativas que es el tremendo cansancio de muchos de los jugadores. Al Mundial del 86, Maradona llegó con 29 partidos sobre las piernas; y si uno hace las cuentas ahora de lo que han jugado Cristiano o Messi, pues posiblemente estén entre 60 y 70 partidos. Eso en un país que tiene un clima especialmente exigente condicionaría el espectáculo.

A pocos días de que se inicie el Mundial, ¿ve a Brasil preparado para organizar un evento de tal magnitud?

Hay que medirlo desde una dimensión no puramente económica. Para muy pocos países del mundo, el fútbol significa tanto como para un brasileño. Por lo tanto, me parece coherente que la política complazca esa sensibilidad de doscientos millones de habitantes. Yo creo que todo aquello que atañe a lo estrictamente futbolístico estará en orden. Ahora, quizás, tratándose de un país tan grande y con déficit de infraestructuras importantes, sí que habrá problemas de comunicación. No sé si los hoteles darán abasto. Pero supongo que lo percibirán como una oportunidad de mostrarle al mundo sus progresos.

Tras la derrota sufrida ante Brasil en la final de la Copa Confederaciones, muchos hablan de un fin de ciclo en La Roja. ¿Cree que es así?

No. Las divisiones sub-21 y sub-19 hablan de que lo de España es algo más que un ciclo, que es algo más que un capricho generacional. Hay un estilo de fondo. Las escuelas se están respetando y eso le va a dar a España continuidad en términos competitivos. Xavi es irreproducible, pero creo que España va a seguir teniendo protagonismo. Eso no hace obligatorio ser campeón del mundo; pero creo que el golpe de autoestima de Sudáfrica pondrá a las nuevas generaciones ante un desafío.

¿ Entiende la decisión de Vicente del Bosque de seguir contando con Iker Casillas, pese a no ser titular en su club?

Me resulta mucho más difícil explicarme la suplencia de Casillas en el Real Madrid, que su titularidad en el Mundial. Su carisma, su madurez y su personalidad, diría que son imprescindibles. Tiene fama de hombre de suerte. Yo creo que eso es un calificativo mezquino de un país muy resistente al éxito de las personas. Los golpes de suerte son excepcionales. Cuando uno lo convierte en parte de la normalidad es que tiene talento.

Argentina parece haber dado un paso atrás en sus aspiraciones. Si el equipo por fin se encuentra, ¿cree que tiene posibilidades en Brasil?

Un equipo que tiene a Messi entre los 23 convocados no puede no ser candidato. Argentina se alejó de sí misma porque se olvidó de la pelota, que fue nuestra gran obsesión durante cien años. Creo que nos alejamos de Menotti, que era el que mejor reflejaba la cultura futbolística del país y eso nos está condenando.

¿Qué le pasa a Messi cuando juega con la selección?

En Argentina esa batalla ya la ganó. Ya metió más goles que Maradona; solo le queda superar a Batistuta y lo hará. Y la sospecha inicial hacia su rendimiento, que fue más un juego periodístico que un sentimiento popular, ya está despejada. Messi es víctima de sus expectativas. Estamos ante un jugador que el día que mete un solo gol nos parece poco. Esa normalidad este año no la hemos visto y por eso parece que está en una decadencia insoportable. Pero bueno, las lesiones y un perseguidor implacable, que es Cristiano Ronaldo, debilitaron esa condición de superhéroe que tenía. Pero hablamos del primer genio del siglo XXI.

De verdad, tras su excelente temporada en la Juventus, ¿no tenía Carlos Tévez sitio en esta selección?

Estamos hablando de una selección que tiene a Di María, Higuaín, Agüero y Messi en posiciones de ataque. Y poniéndome en el lugar del seleccionador, supongo que es consciente de que hay jugadores que son muy buenos titulares, pero son malos suplentes. Pero bueno, Tévez hizo todo lo posible por ir y tiene muy poco que reprocharse.

Una de las grandes favoritas es la anfitriona y reciente campeona de la Copa Confederaciones, sin embargo, Brasil ya no es esa selección que antaño enamoraba...

La presión de un Mundial no es la misma que la de la Copa Confederaciones. Brasil es una selección potente, de tracción trasera. No tiene dos centrales, tiene cuatro, porque los dos mediocentros contribuyen mucho a la difusión del juego. Arriba tiene un único jugador que es coherente con la imagen histórica que tenemos de Brasil, que es Neymar. Se trata de una selección que interrumpe mucho el juego. Durante la Confederaciones hizo más de 25 faltas por partido; disfrutó de cierta complacencia arbitral. Pero un Mundial tiene otra dimensión y va a tener que pelear contra esa terrible presión que a veces empuja y a veces retrae.

¿Ve a Neymar preparado para ser el líder que la Canarinha necesita?

No, no tiene edad para líder todavía. Ni a las personalidades más fuertes las he visto ejercer un liderazgo antes de los 25 o 26 años. Pero bueno, es un jugador que tiene una conexión emocional muy fuerte con el público. Y eso sí que puede favorecer a Brasil.



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