Baloy
El gol de Felipe Baloy nos dio la satisfacción de haberse establecido un récord histórico, al ser el jugador debutante de mayor edad en anotar un gol en el mundial de fútbol.
A esto debemos agregar la escogencia de nuestra bandera como la más hermosa del torneo y contar con una fanaticada alegre y solidaria.
Nuestra selección jugó con dignidad, a pesar de la superioridad de los rivales, y la experiencia nos servirá de mucho para próximos torneos.
Pero lo más importante de todo es que el equipo motivó la unidad nacional como pocas veces se ha logrado en el país.
Estos deportistas han motivado a niños y adolescentes y no dudamos que este será el inicio del surgimiento de nuevas generaciones de futbolistas que participarán en futuros torneos.
Además pudimos conocer la historia de los jugadores a través de sus familiares, quienes destacaron sus orígenes humildes y los valores que les fueron inculcados, sobre todo por sus madres.
Ellas alimentaron sus sueños y los guiaron por caminos alejados de los vicios, así como de las malas compañías.
Es por esto por lo que nuestros futbolistas llevan vidas de unión familiar, transmitiendo a sus hijos los valores con los que se levantaron.
Queda ahora montar una estructura con estadios por todas las provincias para alimentar la ilusión mundialista.