Opinión - 27/7/18 - 12:00 AM

¿Es eso lo que me espera?

Por: Por: El Hermano Pablo Un Mensaje a la Conciencia -

En este mensaje tratamos el caso de un hombre que «descargó su conciencia» en nuestro sitio www.conciencia.net:

«Veo a mis padres levantarse cada día a las cinco de la mañana y volver a las ocho de la noche... Suelo verlos agotados casi siempre y sin tiempo de nada... Cada vez que me despierto para ir a la universidad y los veo, me desilusiono pensando: “¿Eso es lo que me espera vivir como empresario?” Las rutinas me aterran. Detesto que el mundo tenga que funcionar así... Tengo miedo de esa vida triste.»

Este es el consejo que le dio mi esposa:

«Estimado amigo:

»Es prudente que ya esté contemplando las ramificaciones de la carrera que está emprendiendo.

»Aunque muchas personas tienen pocas opciones y consiguen empleos aburridos y físicamente extenuantes, un título universitario, por lo general, les depara más oportunidades. Como usted ya está cursando estudios universitarios, tiene un porvenir con buenas perspectivas. Pudiera parecer que lo que estudia actualmente lo limitará a ciertas profesiones, pero un título universitario en cualquier rama de estudios lo preparará para una amplia gama de profesiones...

»Si usted de veras siente que debe seguir los pasos de sus padres, es importante que recuerde que podrá valerse de tecnología que no existía, sino hasta hace pocos años. Mientras cursa estudios en la universidad, tiene una magnífica oportunidad de investigar las maneras en que pudiera revolucionar los procesos que emplea ese negocio. Desde luego, le llevará varios años incorporar tales adelantos, y quizá tenga que convencer a sus padres (si el negocio les pertenece en la actualidad).

»Si no se le ocurre ninguna opción que pudiera hacer más emocionantes sus planes actuales para un futuro empleo, entonces le recomendamos que considere otras posibilidades... [Ninguna carrera] es una buena opción a menos que esté relativamente seguro de que pueda sustentarse usted mismo y sustentar a su futura familia con sus ingresos. Una de las razones por las que tantas personas tienen empleos que no las satisfacen es que comprenden que el sustentar a la familia es aún más importante que tener una profesión satisfactoria.

»Dios sabe lo que más le conviene a usted, así que necesita su sabiduría divina. Si está dispuesto a entregarle su vida a Él y a seguir sus pasos, entonces podrá confiar en que lo guíe de modo que descubra una carrera y una vida que lo satisfagan a usted. Los que confían en Dios no tienen por qué sentir miedo.»