Opinión - 04/8/17 - 12:00 AM

Colón

Por: Por: Alfonso Zamora Periodista -

Muchos vemos con preocupación la mala condición de vida de los colonenses, afectados por las redadas policiales como consecuencia de las actividades delictivas.

Suele uno preguntarse si las acciones represivas son un show o parte de una estrategia contra el crimen organizado.

Se dice que cuando las autoridades llegan a un lugar, los antisociales ya lo saben y se movilizan, afectando al ciudadano común que se ve intimidado por su presencia.

Recientemente, en Estados Unidos se detuvo a 500 miembros de las maras salvadoreñas sin hacer tanto despliegue mediático, tal como se hace en Panamá.

Las acciones en el país del norte corresponden a un trabajo de inteligencia y seguimiento sostenido por parte de las autoridades.

Son 16 las calles que componen la ciudad de Colón y cuesta mucho entender por qué no se tienen mayores controles para combatir la criminalidad, ni iniciativas sociales que ofrezcan oportunidad a los jóvenes.

¿Cómo se sentirán los niños y jóvenes al ver allanadas sus casas o qué pensarán los policías al irrumpir en estas comunidades pobres?

Por enfrentarse al pueblo, bajo órdenes civiles, surgió un movimiento militar que se apoderó del poder durante dos décadas.

Ante este escenario, no se han manifestado los organismos de los derechos humanos contra los operativos que afectan a gente que no tiene ninguna relación con los asuntos delictivos.

La actuación castrense recuerda a los nazis ingresando a los barrios de Europa buscando judíos a los cuales masacrarían en los campos de concentración.