Opinión - 09/11/17 - 12:00 AM

Humanidad

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Todos los días se escuchan quejas de usuarios de nuestra primera institución de seguridad social, por lo que consideran es el trato descomedido y grosero que reciben del personal de la Caja de Seguro Social (CSS).

Un concepto que le quedó claro a la anterior administración de la CSS fue el de la ausencia de humanismo y solidaridad entre sectores (no todos) que integran el personal administrativo y médico de la institución, lastimosamente la consigna de “humanicémonos”, que preconizó esa administración, no caló, porque se hizo más bien con un ánimo propagandístico.

Es importante que la actual administración de la CSS se fije en el factor humano, que es fundamental en la atención que ofrece la institución, ya que de nada valen las inversiones millonarias en compra de insumos y medicamentos si le damos la espalda a la calidez y comprensión que debe primar en el funcionario o personal médico que trata con personas angustiadas por problemas de salud.

En ese sentido, sería positivo tomar como modelo la entrega, mística y solidaridad que se ven en otras instituciones como el Instituto Oncológico Nacional (ION) y el Hospital Santo Tomás, donde es posible casi que palpar el calor humano de sus funcionarios, entregados a una misión casi que religiosa de llevar consuelo al paciente que sufre.

Es necesario retomar al usuario como el centro y la razón de ser de la Caja, concienciar al funcionario de que la amabilidad y la consideración hacen más bien al corazón afligido que cualquier medicamento.