Manuel Chong Neto

Chong Neto dijo que hay muchos jóvenes talentosos trabajando bien preparados, pero hay también muchos que no hace más que repetir fórmulas que ya han sido superadas en nuestro país.

Continuación del artículo: LA VOZ Y LOS SIGNOS. CHONG NETO: OJOS, BÚHOS Y CLAROSCURO.

P: ¿A qué se debe esa dificultad? A una falta de promoción por parte de las galerías, los precios o las circunstancias del mercado nacional que consume obras de arte?

R: Yo creo que es lo último. Las galerías, por lo menos con las que he trabajado, se han preocupado por promover la obra. Pero el número de habitantes nuestro no permite un mercado tan grande como para que uno viva de su oficio.

El problema del precio es un dilema interesante: si uno pone un precio alto, la gente no está en condiciones de comprarla. Si uno pone un precio demasiado bajo, piensan entonces que la obra no tiene valor.

P: ¿Cómo ve usted la enseñanza de la pintura aquí en Panamá? ¿Piensa usted que hay escuelas adecuadas, profesores bien preparados para la enseñanza?

R: Creo que está mejorando cada día más la enseñanza del arte. Con la creación de la carrera de Artes Plásticas de la Facultad de Arquitectura se dio un paso muy grande en ese sentido. La misma escuela de Artes Plásticas está haciendo lo necesario para ser una buena escuela de artes plásticas.

Sin embargo, pueda ser que esta enseñanza sepa hallar un equilibrio entre la enseñanza del oficio de pintor y el desarrollo de la creatividad. Sería lo que ayudaría a adentrar a los estudiantes hacia nuevas corrientes. Debe buscarse un balance entre estas dos cosas.

P: ¿Cómo observa usted el fenómeno plástico actual? ¿Cree que estamos, en cierta medida, actualizados en lo que a pintura se refiere?

R: En la pintura se está dando un fenómeno igual al que se está dando en todas las facetas del arte: hay una especie de globalización. Se está tratando de hacer que lo que se pinta en Panamá sea igual a lo que se pinta en Nueva York, en Europa y en todas partes. Con esto se están perdiendo ciertas características que tenía la pintura latinoamericana: riqueza de oficio y de conocimiento técnico. Ojalá que esto no se pierda.

Actualmente, nuestros jóvenes pintores, entre los que hay algunos muy talentosos, hay muchos que parecieran copiar lo que sale en las revistas que se publican en Norteamérica y en otras partes. Pero en esas otras partes no existen las mismas condiciones que existen en Panamá. Entonces la pintura pasa a ser un reflejo de una realidad completamente diferente a la nuestra.

P: ¿Cómo observa usted a las actuales generaciones de pintores?

R: Hay muchos jóvenes talentosos trabajando bien preparados. Pero hay también muchos que no hacen más que repetir fórmulas que ya han sido superadas en nuestro país.

P: ¿Si se le pidiera escoger a cinco pintores nacionales por la importancia de su obra, ¿qué pintores escogería usted?

R: A mí me resulta muy difícil opinar sobre la pintura de los de más colegas, a quienes respeto muchísimo. Yo diría que hay un grupo de pintores que ya tienen ganado un nicho en la historia del arte en Panamá. Yo respeto mucho el trabajo de mis colegas.

P: ¿A qué se debe su aparente retiro de la escena nacional?

R: No hay ningún retiro realmente. Lo que pasa es que estoy produciendo poco por un problema de salud, pero ya he vuelto a retomar las cosas.

No acostumbro a presentar exposiciones, sino cada dos o tres años. Actualmente hay un cuadro mío recorriendo América Latina hasta el año dos mil en la colectiva Iberoamérica Pinta. He estado cooperando en varias colectivas. Lo último que estoy haciendo es cooperar con la Cancillería de la República en una serie de publicaciones que van a ser de literatos panameños ilustradas con cuadros de pintores panameños para conmemorar la entrega del canal.

Continúa el próximo domingo.