Promoviendo la eliminación del plástico
La contaminación del ambiente por el uso indiscriminado del plástico es una preocupación constante en muchos países, pues según informes de las Naciones Unidas, se estima que cada año se vierten en los mares 8 millones de toneladas de plástico y de continuar en ese paso, habrá más contaminantes que peces.
El uso medio de una bolsa de plástico es de 10 minutos y el tiempo que tarde en degradarse es de 400 años. El plástico, a pesar de sus ventajas y precio económico, es un producto nocivo para el ambiente, porque su fabricación se realiza a partir de derivados del petróleo y se convierte muy rápidamente en un residuo altamente contaminante.
En Europa, la legislación prohíbe a los comercios, desde el 1 de enero de 2018, entregar bolsas de plástico gratuitamente a sus clientes.
En Panamá, mediante la Ley 1 de 19 de enero de 2018 se adoptan medidas para promover el uso de bolsas reutilizables en los establecimientos comerciales, prohibiendo el uso de bolsas de polietileno para transporte de productos o mercaderías.
Los supermercados, farmacias y minoristas tendrán 18 meses a partir de la promulgación de la ley para proceder con el reemplazo de las bolsas; los almacenes y mayoristas tienen 24 meses para realizar el cambio. Esta ley no será aplicada cuando por cuestiones de asepsia se tenga que utilizar las bolsas de polietileno para contener alimentos e insumos húmedos elaborados o preelaborados y no resulte factible la utilización de un sustituto compatible con la minimización del impacto ambiental.
Se destaca que los comerciantes pueden optar por el cobro o no de las bolsas reutilizables, siempre y cuando la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco) fiscalice que sean vendidas a precio de costo. Para tal efecto se deberá remitir a esta entidad, a inicios de cada año, el costo declarado de estas.
Asimismo, la Acodeco determinará las sanciones que correspondan por el incumplimiento o transgresión de esta ley, de acuerdo con lo establecido por la Ley 45 de 2007 (de protección al consumidor y defensa de la competencia). Los ingresos recaudados por las multas pasarán a un fondo creado por esta institución, destinado a los programas de reciclaje y docencia sobre temas relacionados con materiales contaminantes.
Por otra parte, el Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) es el responsable de desarrollar campañas de difusión y concienciación nacional sobre el uso racional de material no degradable y no biodegradable, así como realizar actividades para que empresas no previstas en la ley se adecúen a las exigencias de la misma.
También los consumidores tienen la responsabilidad de proteger un ambiente saludable, que favorezca la calidad de vida a generaciones presentes y futuras. Hay que preferir las alternativas para eliminar el uso del plástico no biodegradable, que tanto daño hace al planeta.