Que prive el diálogo
Las diferencias entre el actual director de la Caja de Seguro Social (CSS), Alfredo Martiz, y la Comisión Médica Negociadora Nacional (Comenenal) no tardarán en hacer crisis, en cuyo caso, serán los asegurados quienes pagarán las consecuencias del diferendo.
Desde ya advertimos que los usuarios de nuestra primera institución de seguridad social no aguantan un paro más, si el servicio en tiempos normales es pésimo, ahora imaginemos con un paro... Dios nos agarre confesados.
Dentro del juramento hipocrático hecho por los médicos, está el usar toda su ciencia y sapiencia para curar o por lo menos aliviar el dolor de sus pacientes, por lo que cualquier amenaza de suspensión de la atención a los pacientes, es una negación rotunda a tal juramento.
Por otra parte, el director de la institución debe evitar caer en la diatriba y los dimes y diretes con los gremios médicos y administrativos de la institución. Por el contrario, debe buscar los mecanismos para sumarlos a su labor de profilaxis y adecentamiento administrativo.
Martiz debe aprovechar la credibilidad y esperanza que en sobre él tienen los usuarios, para sumar y no restar. Es verdad que se debe parar firme ante la intransigencia, pero también es preciso tener cuidado de no caer en la intransigencia.
Ambos sectores deben comprometerse con la opinión pública a zanjar sus diferencias dentro del marco del diálogo constructivo, amplio y de puertas abiertas y no dejar que se impongan los "cabezas calientes" que todo lo quieren resolver con huelgas estériles.