Opinión - 05/1/18 - 12:00 AM

Un nuevo año en la vida del adulto mayor

Por: Por: Gabriela Arosemena Montenegro Twitter: @Gabby_Aro - Viernes 05 de Enero de 2018 12:00 AM

Para la gran mayoría de las personas, la llegada de un nuevo año representa 365 nuevas oportunidades; muchos se trazan metas, desde las más clásicas, como las dietas de inicio de año, hasta empezar una carrera o viajar por el mundo, sin embargo, en una persona de avanzada edad, el panorama puede llegar a ser muy distinto.

“Año nuevo, cosas nuevas”, ese es el eslogan con el que a muchos nos gusta iniciar el año; pero ¿qué representa el inicio del año en un adulto mayor? Miedo, preocupación, crisis existenciales son algunos de los elementos que rodean el cambio de año de esta población en particular, toda vez que son personas que ya han vivido bastante, han presenciado el paso del tiempo y los cambios que esto acarrea en todos los aspectos y, por ende, es solo comprensible que se sientan cansados, desganados y no piensen en el futuro como algo certero.

Lo anterior no está escrito en piedra ni constituye una verdad definitiva al destino de todos los adultos mayores, muy por el contrario, esta forma pensamiento claudicante es un aforismo que puede ser erradicado al tratar de practicar una cultura de inclusión para nuestros adultos mayores en la que estos últimos también vean oportunidades con la llegada de un año nuevo y en función de ello se tracen metas alcanzables que puedan contribuir a la promoción de una jubilación activa.

Una jubilación activa representa todo un abanico de posibilidades en cuanto a actividades se refiere, aprender una nueva destreza (cocina, repostería, idiomas, cursos, deporte, etc.).

Un largo camino queda por recorrer en cuanto a concienciar a la población joven acerca del rol que desempeñan los adultos mayores en la sociedad panameña, el cual va más allá del concepto tan arraigado que tenemos de que son cuidadores de los nietos, compradores compulsivos de lotería y persona frágiles sin utilidad aparente; una realidad triste pero palpable a diario y es nuestro deber como país el ser más inclusivo y lograr un balance en todas la poblaciones vulnerables y no vulnerables que forman parte de nuestra sociedad.